23 de enero de 2010

Gerente por un día (Nº 2): "El transformador del mal rollo"



'¡Oye, Blas!'

'Yo nací para esto, Kyle'

Segunda edición de esta sección dedicada a los relatos de todos ustedes, gerentes en el exilio disfrazados de personas normales. De otra manera, no podrían concebir nuevas páginas de este su desvencijado parque con semejante naturalidad y, sí, digámoslo ya pues es evidente, talla moral e intelectual. Es algo que nos hinche de orgullo, no de sorpresa, empero, pues sabemos que ustedes son nobles, poderosos y granguinolescos. Mas, ¡cesen los introitos y ábranse ya las compuertas de esta nueva atracción! Limonessa del ilusorio es la responsable y por ella los cuervos vuelan en círculos hoy sobre nuestras cabezas. Gracias, amiga.


Había sido un año enormemente productivo para Cristóbal. Y es que, estar enamorado de la mujer del abrigo gris era inspirador para él. Bien es cierto, que no todos sus inventos fructificaron. Por ejemplo “El extractor de problemas a presión con mangos de colores” tenía un defecto en la resistencia del material que debía hacer fuerza para la extracción. Ese defecto nunca pudo ser corregido. Lo mismo ocurrió con “La destructora de las preocupaciones”. Sin embargo con “El saquito contenedor de sensaciones agradables” consiguió alzarse con el premio nacional al Inventor del Año (prestigioso premio concedido por la revista Geniality). El jurado valoró la originalidad, la eficacia en la conducción del bienestar, la portabilidad del saquito y la utilidad general de la creación.

Y ahora, ¡no lo podía creer!... Se abría en Cuervolandia la última atracción que había salido de su imaginación “El transformador del mal rollo” y además para su mayor regocijo la gerencia había aceptado una ubicación entre un cuervocajero automático y un cuervorestaurante -nada que ver con la ubicación inicial junto a los cuervoWC-.

El transformador se convertiría en la atracción estrella, había levantado una gran expectación. Para empezar, utilizar con éxito la atracción te suponía no un gasto de cuervofichas marrones, sino una devolución de las mismas a usar en cualquiera de las demás atracciones (incluido el cuervocasino). Cubero fue el primero en utilizarla, quería dejar de ver medusas crecientes que le sonreían. Para ello entregó 10 cuervofichas marrones a Jacquelyn. Sí, eso es, Jaquelyn superó todas las pruebas para incorporarse como controladora de la nueva atracción, fue seleccionada entre varios individuos trabajadores temporales y permanentes de Cuervolandia. Para ellos suponía un prestigio adicional, además de un incremento nada desdeñable de su imaginario sueldo. Su labor consistía en valorar a simple vista un grado de mal rollo aceptable para poder ser transformado en buen rollo a lo largo del recorrido; recoger las cuervofichas y devolverlas en caso positivo y dar el primer empujón a los usuarios dentro de su flotador de óxido de nitrógeno. Una vez impulsados desde la rampa del malestar los usuarios van desprendiendo problemas y preocupaciones al rebotar con las paredes de buenos recuerdos. Después caen desde la cascada de la risa a la piscina de la serenidad, allí permanecen el tiempo necesario y se aproximan a las duchas de limpieza de impurezas. Finalmente unos cuervos con vista afilada hacen el último control de calidad, si detectan alguna anomalía (malos pensamientos, hostilidad latente, envidia, rencor…) agarran los flotadores con sus afilados picos y lanzan a los usuarios a las tuberías de la realidad, donde una sucesión de pequeños extractos del programa “Informe Semanal” tratarán de demostrarle que su mal rollo no tiene razón de ser, comparado con el estado del mundo. El óxido de nitrógeno va impregnando esas tuberías. En la salida un medidor de estabilidad emocional indicará la posibilidad o no de recuperar sus cuervofichas. Intentar cantar una canción de Pavarotti en ese momento está bonificado con 2 cuervofichas.

Desconocemos la suerte de Cubero ya que los recorridos de la atracción son confidenciales. Lo que sí sabemos es que Lupiáñez ha presentado una solicitud formal para usar la atracción como terapia con neuróticos. Cristóbal ya ha advertido que no admitirá al agresor de Berlusconi ni a otros casos dudosos de mal rollo o de gran impacto mediático. No aspira a la fama. Todo lo contrario de su medidor de estabilidad emocional que ya ha confirmado que había concedido una entrevista a Kyle Mirandilla. (Kyle, por razones desconocidas, muestra un interés desmedido en entrevistar al insuflador de óxido de nitrógeno).

Cormonas cierra “La voz de los Monegros” con rabia y arroja el diario a la papelera, “¿Cómo es posible?” de nuevo Cuervolandia lanza una atracción que va a superar con creces a cualquier montaña rusa o lanzadera o espectáculo de fuegos presentes en sus muchos parques. Entonces una sonrisa maliciosa se dibuja en su cara…


Bien, y los demás ¿a qué esperan? Si creen que Cuervolandia no es digna de ese nombre hasta que no escriban ustedes sobre ella (y creen bien), hágannos llegar sus textos a la dirección de nunca: cuervosdelmundo@yahoo.es

8 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho el texto.
    Esta máquina que quita el mal rollo es todo un invento.
    Madre mía el éxito que va a tener la máquina. La patente va a estar muy solicitada.
    Saludos y enhorabuena.

    ResponderEliminar
  2. Minicomentario para Anónim@: Ya se está ud. pasando un par de veces por el transformador de marras.

    ResponderEliminar
  3. Amigoimaginario30/1/10 2:08 p. m.

    Qué distintas serían las sesiones del congreso de los diputados si en la entrada hubiese un transformador... No me imagino a lo q podríamos llegar!!

    ResponderEliminar
  4. Una vez más enhorabuena a la gerente por un día. Esta vez ha dado en el clavo con la atracción que es genial y además ha sabido captar la singularidad de cuervolandia ya que lo normal es que todo el mundo esté acostumbrado al invento contrario, el transformador de buen rollo en mal rollo que vulgarmente conocemos como televisor.
    Un abrazo y enhorabuena.

    ResponderEliminar
  5. AL BUZÓN DE SUGERENCIAS (Con abertura en forma de pico):

    Está claro que las gerentes por un día habidas hasta ahora, sobrepasan en calidad a los propios gerentes.

    Estos dberían hacer acopio de la poca responsabilidad política que aún les quede y dimitir en beneficio de quienes mejor pueden regir el destino del parque.

    Este supuesto derecho vitalicio es de todo menos democrático, más se parece a un régimen autoritario. Debería haber una transición pacífica y ordenada, ahora que están a tiempo y la situación no se ha deteriorado demasiado.

    Para no levantar suspicacias, yo no me postulo como gerente, porque hay personas más capacitadas que yo para llevar a cabo satisfactoriamente tan alta y delicada tarea. Como por ejemplo, el Anónimo que me precede.

    Postdata: ¿Qué se hace con las sugerencias recibidas, se estiman y reciclan o, según bajan por el buzón (con abertura en forma de pico) caen en una destructora de documentos? El tiempo lo dirá.

    ResponderEliminar
  6. Almadelluvia
    Viajando por Cuervolandia, enredados a mi patita pequeños pedacitos de dulzura, tras pasear por la máquina cristobaliana.A lo lejos-cerca una procesión mediática de insignificantes cuervos que miran al frente ,como rocas que extienden su abrazo desde el pánico.
    Ea! que sean imprescindibles los cementerios para cuervos sin respuesta, sin conjuros Cristobalianos.
    Los cuervos "decentes" nos pondremos tacones de Armani, estirando las espaldas como negaciones y yupi!!bailaremos un vals negro, negrísimo.Apartáos tarugos u os pisaremos las retinas ,,,carambas!
    Iremos a las bodas de las cigueñas y nos comeremos las dudas de los infames( de merienda).
    Yuhu! Yuhu!Se inicia el monopolio de su fracaso.
    ( me ha encantado la historia, que bien lo hacéis!)
    Eddie , muaks , muaks , para ti y para Salamanca.

    ResponderEliminar
  7. Estimados cuervoamigos, este comentario que publicamos es para dar pie a Limonessa a que conteste el correo como corresponde a todo gerente bien sea por un día o los de contrato indeterminado. Simplemente nos gustaría aclarar que fuera de nuestro estilo habitual hemos decidido censurar algunos comentarios sido objeto de unos ataques de algún anónimo internauta que con motivos publicitarios pretende aprovechar la calidad de nuestra página para hacer el agosto en pleno mes de febrero. Vaya por delante que la cuervogerencia no tiene nada que ver con esos anuncios ni con esos mensajes.Nosotros nos quedamos con los comentarios de Uds. Cuervoamigos que sí nos importan y prometemos que en plazo breve volveremos a abrir nuestras puertas con algún relato que esperemos no defraude sus expectativas. Un abrazo a todos.

    ResponderEliminar
  8. Perdón por este retraso en mis obligaciones como gerente por un día,

    Agradezco a todos los comentarios, ánimos y este compartir de experiencias de Anónimo tras pasar por la máquina; Espero que sus augurios se cumplan, Interruptor y la máquina se venda como churros; Amigoimaginario, la versión para el Congreso de los diputados sería demasiado compleja, necesitamos algún año más de desarrollo de esta primera versión; Eddielucas mi relato es singular porque Cuervolandia también anida en mí; Palomitera, no de Vd ideas sobre la gerencia...Por cierto, alguno de los comentarios también deberían pasar por el transformador del mal rollo. Y por último a los gerentes "agradecidaaa y emocionadaaa solamente puedo decir gracias por venir"

    ResponderEliminar

Sírvase expresar aquí su graznido: