8 de agosto de 2008

El segundo gerente. Chapter one: Tanilli.


'¿Sabes cuánto puede tardar en ser devorada un alma?'

'Mujer de Lot' u 'Orfeo'

Cuervolandiaaaaaaaaaaa!

Iré al grano y no abundaré en detalles anodinos, tuve una infancia feliz y una adolescencia atormentada, como todos uds., supongo. Sin embargo, a diferencia de muchos de uds. mi existencia fue jalonada por dos hechos extraordinarios que han hecho de mí lo que soy. Hoy voy a hablarles del primero de ellos.

Mi historia empieza en los años 80, por aquel entonces yo atravesaba una etapa bohemia de mi vida, residía en Alemania, era poeta existencialista y hacía video arte (les pondría unas cintas, pero sólo grababa en beta). Como uds supondrán eso no me daba de comer, así que me ganaba la vida haciendo de modelo ocasional para catálogos de grandes almacenes en Dörmundt y Hannover, y haciendo de gogó, también ocasional en diversas discotecas y salas de fiestas. Era el amanecer de la música disco, Europa veía nacer y morir cada día ídolos musicales que la industria generaba y se comía como un moderno Saturno con hombreras y pelo lacado.

El mundo de los y las gogós está lleno de poetas existencialistas, y fue allí donde conocí a Fab Morvan y a Rob Pilatus, dos gigantes de la poesía anarquista y ácrata, que como todos los gigantescos poetas ácratas eran tan enormes como desconocidos. Juntos recorrimos los peores antros de Münster y Bremen, incluso un día nos fuimos a Duisburgo... ¡Salvaje Duisburgo! No teníamos un duro, pero éramos amigos, componíamos acendrados versos para remover las aborregadas conciencias pequeñoburguesas de nuestros compañeros de generación en los años del florecimiento del liberalismo Reagan-Thatcheriano.

Un día actuando de gogós un tipo nos presentó a Sabrina, una nihilista italiana fan de Rimbaud y Verlaine que venía rompiendo las pistas con un ritmo nuevo que ella daba en llamar Italopop y usando la sensualidad explícita para poner en evidencia la doble moral de las clases pudientes y provocar así la reacción feminista. En cuanto nos conoció propuso a Frank Farian, su productor, que sería el desencadenante de todo lo que vino después.

Fab, Rob y yo fuimos gogós de Sabrina, en sus primeros hits "Sexy Girl" y "Boys". Gracias a su talento y a nuestro apoyo, Sabrina triunfó primero en Europa, luego en USA. Con el dinero ganado Fab, Rob y yo pensábamos que podríamos dar difusión a nuestra poesía existencialista, denunciar el capitalismo social usando el rap y la música electrónica para llegar a los jóvenes, auténticos pulmones de la revolución... ¡Teníamos la hermosa idea de cambiar el mundo con canciones! Así nos separamos de Sabrina e iniciamos nuestro propio grupo Milli, Vanilli y Tanilli, en claro homenaje a tres líderes batusis que combatieron contra las tropas imperialistas británicas en Soweto y como claro grito antiapartheid.

El resto ya lo conocen, Farian cegó a mis amigos con el oropel de la fama y el dinero, en principio acortó el nombre del grupo, después me hizo notar que el grupo funcionaría mejor como dúo y ofreciéndome permanecer en él como compositor y letrista; cuando cambió las letras anarquistas por mensajes de amor comercial, yo ya había dejado el grupo y nuestra amistad.

En febrero de 1990 asistí a la derrota de mis ideales viendo recoger a Fab y Rob el grammy al grupo revelación. Sonrientes y posando con el premio, parecían felices de llevar una vida de playback. Como los tres líderes batusis, también perdimos ante el imperialismo occidental.

Ya saben el final de la historia. En noviembre de ese año, cuando mis amigos estaban en la cima, Farian los dejó caer, su empresa siguió ganando dinero y publicidad con el escándalo, ellos se convertirían años más tarde en un icono del pop universal... Pero a partir de ese año nuestras vidas se truncaron y mis ideales de joven romántico sufrieron una agonía ¿irreversible? Lo contaré en la segunda parte.....


Cuervolandia existe en tu corazón.

¡Disfrute en el Cuervoacuario ahora con peces marrones!

No bañarse en el estanque, las carpas pueden atacar al ser humano.