tag:blogger.com,1999:blog-167126508557195517.post8663398253400054295..comments2024-01-05T18:29:02.356+01:00Comments on Cuervolandia: Para todos los públicosLos gerenteshttp://www.blogger.com/profile/15510015076842305508noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-167126508557195517.post-39319138920124889562007-06-17T20:35:00.000+02:002007-06-17T20:35:00.000+02:00Respondiendo a la pregunta que hacías en mimenor: ...Respondiendo a la pregunta que hacías en mimenor: El blog de Asmadeus dejó de existir. El tal 'David' que lo ocupa ahora ha recuperado una parte del relato original, escrito por el primero, y ahora se aprovecha de la página para explotar los anuncios publicitarios.<BR/><BR/>Saludos.Anonymoushttps://www.blogger.com/profile/09481779897039636891noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-167126508557195517.post-20843425769037559942007-06-11T12:09:00.000+02:002007-06-11T12:09:00.000+02:00Apreciada Ana, los gerentes te agradecemos tu amab...Apreciada Ana, los gerentes te agradecemos tu amabilidad. Esperamos volver a verte por aquí. Por nuestra parte seguiremos visitando tu blog, que tan buenas sensaciones nos deja. ¡A nosotros sí que nos ha gustado la historia de D. Francisco! :DLos gerenteshttps://www.blogger.com/profile/15510015076842305508noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-167126508557195517.post-10710502504761416772007-06-10T15:51:00.000+02:002007-06-10T15:51:00.000+02:00Me ha encantado el cuento, eres fantástico escribi...Me ha encantado el cuento, eres fantástico escribiendo. Me acordé de Don Francisco, un señor que ahora ya murió, pero al que veía dia tras día con su boina y su bastón (garrote) en mano. Era comiquísimo verlo tan lleno de razón, los coches tenían que parar como fuera si él tenía que cruzar, porque él era Don Francisco, que tiempos aquellos en que no pasaban tantos coches y si lo hacían respetaban a los mayores, ahora los chicos conducían como locos y no respetaban la edad. Pero así era, y ahí íbamos todos a detenerlo antes de que cruzara para evitar que lo atropellaran, con cualquier excusa hasta que el semáforo se ponía en verde para él. Y en el parque, se sentía el abuelo de todos los niños, especialmente del mío, y como alguien le hiciera pupa, hay se levantaba Don Francisco a amenazar a los gamberros que le hacían llorar a su nieto adoptivo (lo adoptó como suyo porque vivíamos en el mismo edificio). Y las patatas también las llevaba y una tableta de chocolate, para darle a mi Alex que no se quedara sin fuerzas luego de jugar. Luego venían los dos juntos, y yo a una distancia prudencial, hasta que alex comenzó a cuidar de que él no cruzara sin mirar, tirándole del brazo. <BR/>Llegaremos nosotros a ser asi? <BR/>Un beso enorme, me ha encantado tu historia. Muchísimo. Te he contestato el comentario en mi blog.tumejoramig@https://www.blogger.com/profile/07792654863240188159noreply@blogger.com